El gobierno provincial prioriza la construcción de un nuevo acueducto para revertir décadas de deficiencias en el suministro.

Roberto Garro, gerente de Servicios Públicos, destacó el compromiso del gobernador Claudio Vidal y subrayó que, por primera vez en años, se encara el problema estructural con responsabilidad y visión a largo plazo.
Tras más de veinte años marcados por la precariedad en el suministro de agua potable, Río Turbio inicia un camino hacia una solución concreta y duradera. Con el apoyo del gobierno provincial, y en particular del gobernador Claudio Vidal, se ha determinado como prioridad la construcción de un nuevo acueducto que permitirá garantizar el abastecimiento tanto en Río Turbio como en 28 de Noviembre.
Roberto Garro, gerente local de Servicios Públicos, explicó que esta decisión es el resultado de un análisis técnico exhaustivo sobre las necesidades más urgentes de la región. En ese marco, agradeció al personal del organismo por su labor constante y valoró la voluntad política de encarar una obra de semejante envergadura.
“Estamos dejando atrás una herencia de falencias, improvisaciones y parches, para avanzar con una planificación responsable y transparente. La gente merece soluciones reales”, afirmó Garro. Además, destacó la articulación entre los distintos niveles del Estado como clave para avanzar en políticas públicas que aseguren derechos esenciales, como el acceso al agua potable.
Este nuevo enfoque marca un cambio de paradigma para la Cuenca Carbonífera: se pasa del abandono a la acción, de la urgencia permanente a un plan que proyecta sustentabilidad a futuro.